lunes, 14 de junio de 2010

¿Existe el paraiso?. 2ª Parte.

El tercer día, al igual que en el anterior, no nos libramos de madrugar así que eso de las 7:30 horas ya estabamos en el pesquero.
Probamos en otra zona que nos indicó Manolo, pero esta vez no ibamos a tener la misma suerte que en el día anterior. Supongo que la entrada de más viento, y en consecuencia peor estado de la mar complicó un poco la cosa. Cinco o seis capturas y poco más acabaron con un día bastante malo, ya que el cuerpo acusó el cansancio de días anteriores. Así que sin pensarlo dos veces nos fuimos a descansar.
El cuarto y último día, nos iba a deparar una sorpresa que tardaríamos bastante en olvidar. Esa jornada Dani y Fran decidieron quedarse en tierra para terminar algunas tomas de la isla y así poder acabar el documental, por lo que fuimos Coke, Toni, Juli y un servidor junto al magnífico skipper Manolo a las marcas del primer día de jigging.
Nada más llegar comenzaron a sucederse las capturas y la jornada parecía que prometía. No nos equivocábamos, ya que así fue.
Decidimos pescar a light jigging en fondos menos profundos, disfrutando como niños con las picadas y capturas en equipos más livianos. La guinda del pastel la puso Toni, clavando y subiendo al barco un mágnifico peto de unos 16 kilos.
Al volver a tierra, paramos el barco y disfrutamos de una rápida sesión de spinning, capturando Coke un dentón con un Roosta Popper, el "Tito Juli" dos anjovas y el "crack" Toni dos bonitos. Un servidor sólo capturó una palometa pequeña y un cabreo de narices. jajajajaja. Pero bueno, yo ya había cumplido.
Cuando volvimos a nuestras casas en la Península, pudimos contar a nuestras familias que habíamos encontrado el paraiso. Y no dudeis que volveremos.
Toni, el gran triunfador
Servidor con una Serviola Fasciata
Toni, disfrutando a light jigging como ninguno
Juli con un dentón a light jigging
Juli y una de sus anjovas a spinning
Coke y uno de sus Sardas Sardas
Y el video que redondeó la jornada

martes, 8 de junio de 2010

¿Existe el paraiso?. 1ª Parte.

Si existiera, os puedo asegurar que se llamaría Isla Graciosa.
No podía dejar escapara la oportunidad de volver con mis mejores armas al lugar que me dejó alucinado el pasado mes de enero.
Esta vez sabía donde volvía, que tenía y como lo iba a hacer. La compañía al igual que la vez anterior, de sobresaliente. Ni una voz más alta que otra, todo conformismo y un rebose de amistad que hace que cualquier persona dé gracias a dios por rodearse de gente tan maravillosa.
Rumbo a la isla, con diferentes medios de transporte nos dirigimos: Toni, Juli, Coke, Dani, Fran y un servidor para pasar cinco días, que os juro no olvidaré mientras viva.
El primer día al llegar, sin pensádnoslo dos veces preparamos los equipos de spinning costero y nos dirigimos hacía el "Caletón de la Surta", para comprobar que aún el comezón no se había acercado a la costa, lo que nos limitaría las capturas por su ausencia.
Sólo le vimos la cara a un "Sarda Sarda", capturado por un servidor con un Jugulo Jig Casting y una picada que no olvidaré en un tiempo (supongo que fue una anjova de considerable tamaño), que se llevó el señuelo dejándome pasmado.

Al día siguiente Manolo nos esperaba en puerto para tener una sesión de jigging, que podríamos definir como "fuera de lo normal". Las capturas se sucedían una tras otra y la adrenalina nos salía a borbotones. Tuvimos muchas capturas y nos lo pasamos en grande.
El cansancio ya hacía mella el segundo día, pero sabíamos que aún nos quedaba bastante que decir en estas aguas.

No todo fue pesca. Dani y Fran disfrutaron como niños con las piscinas naturales de la Isla.


Coke con uno de sus dentones


El TitoJuli demostró por que es un maestro

Un servidor con un "Sarda Sarda"

Toni con un pargo. Al final sería la estrella del viaje


Como en todo el viaje. Siempre al lado de mi compadre Coke

Y un video para el recuerdo